La glándula tiroides tiene forma de mariposa y normalmente se localiza en la parte de adelante del cuello.
Su trabajo es formar las hormonas tiroideas, las cuales ayudan al cuerpo a utilizar energía, mantener la temperatura corporal y a que el cerebro, el corazón, los músculos y otros órganos funcionen normalmente.
De ahí la importancia de realizar chequeos periódicos, para saber como se encuentra esta glándula.
¿Qué exámenes debo realizarme para chequear mi Tiroides?
Generalmente, se debe realizar exámenes de sangre y un Eco de Cuello para comprobar su correcto funcionamiento.
¿Qué enfermedades se
pueden derivar de la Tiroides?
Las enfermedades que puedo tener por trastornos son:
- Hipertiroidismo
- Hipotiroidismo
- Cáncer de Tiroides
Cáncer de Tiroides
El cáncer de tiroides usualmente es muy tratable y con frecuencia se puede curar con cirugía y en casos indicados con yodo radioactivo.
Aun en los casos de cáncer de tiroides más avanzados, existe tratamiento efectivo para la mayoría de las formas comunes de cáncer de tiroides.
Aun cuando el diagnóstico de cáncer de tiroides suele ser aterrador, el pronóstico para la mayoría de los pacientes con cáncer papilar y folicular es usualmente excelente.
¿Cómo se diagnostica
el Cáncer de Tiroides?
Los resultados de la biopsia por aspiración con aguja fina de un nódulo tiroideo pueden sugerir el diagnóstico de cáncer de tiroides y este puede ser determinado con certeza una vez que el nódulo es removido con tiroidectomía.
¿Cuál es el Tratamiento del Cáncer de Tiroides?
El tratamiento primario de todas las formas de cáncer de tiroides es la tiroidectomía.
La extensión de la cirugía para cáncer diferenciado de tiroides dependerá del tamaño del tumor y de si el tumor está o no limitado a la tiroides. El procedimiento que consiste en remover solo el lóbulo que tiene el cáncer, se conoce como lobectomía y remover la tiroides completa se denomina tiroidectomía total.
A veces los hallazgos antes o al momento de la cirugía- tales como extensión del tumor en las áreas a su alrededor o la presencia de ganglios linfáticos que están obviamente afectados- indicarán que una tiroidectomía total sería la mejor opción.
Después de la cirugía, los pacientes necesitan tomar hormona tiroidea de por vida.
Con frecuencia, el cáncer de tiroides se cura con solo la tiroidectomía, especialmente si el cáncer es pequeño.
Si el cáncer dentro de la tiroides es grande o si se ha extendido a los ganglios linfáticos del cuello, o si su médico piensa que usted tiene un riesgo alto de recurrencia, el yodo radiactivo puede ser utilizado después de sacar la glándula tiroides.
Fuente: Asociación Americana de Tiroides
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